Varios medios recogieron el pasado mes de enero la polémica ley rumana que descuenta 30 días de cárcel a cada convicto que publique un estudio científico. Esta ley data de la era comunista y estaba planteada para presos que no pudieran hacer trabajos manuales. El problema es que en los últimos 3 años el número de escritores científicos en prisión ha aumentado espectacularmente y 188 prisioneros han publicado 415 libros.
etiquetas: ciencia
noticia original (www.elespanol.com)